¿Hablamos de cobertura?

De unos años aquí, las tendencias en cuanto a los acabados del maquillaje han cambiado, antes se buscaban pieles con acabados perfectos, piel con altas coberturas para no dejar asomar ninguna imperfección. Las imperfecciones en la piel están y siempre estarán, la piel es perfecta con ellas, porque es piel, y hay textura, hay poros y hay ojeras…  Podemos mejorarlo si, pero van a seguir estando. Así que lo mejor, para empezar, es aceptar nuestra piel tal y como es y amarla así, con todas nuestras perfectas imperfecciones.  Mi misión con este post es que cuando os miréis al espejo cada mañana, queráis a vuestra piel como está ahí, recién levantada. Y una vez hagáis ese paso ya podemos a sacar lo mejor de ella.

Primero con el cuidado facial y con la buena rutina (no os voy a dar más la chapa con esto) pero por favor como digo siempre es la BASE de todo.  Ya sabéis que podéis adquirir una asesoría totalmente gratuita en la web (solo tenéis que suscribiros, está en el apartado de cursos)  os ayudará a saber lo que tenéis que hacer para llevar una buena rutina facial.

Y después de hacer ese paso a conciencia, vamos con el color.  Y aquí siempre digo que os olvidéis de las tendencias, y que os preguntéis,

¿Qué quiero yo para mí piel? Pero sobre todo, ¿Qué necesita?

En muchas ocasiones me encuentro con que aportáis altísimas coberturas, porque pensáis, “tapa más” y en la mayoría de casos es una cuestión o de un mal marketing que os han vendido  o que todavía no habéis identificado las necesidades de vuestra piel y os basáis en la tendencia de esa base de maquillaje  que “tanto se lleva ahora” porque la infuencer de turno la saca en redes.

 Porque quizás le estás aportando una textura innecesaria, que por querer “tapar” lo que crees que no se debe de ver, estás aplicando un exceso de producto que es totalmente innecesario y contraproducente, al final el resultado es que todo sea mucho más evidente. 

¿Sabes que con una misma base de maquillaje puedes conseguir diferentes resultados dependiendo de la herramienta  y técnica que utilicemos? No hace falta que tengáis (esto me hace mucha gracia siempre) una para los fines de semana y otra para entre semana… Podemos trabajar esa misma base y darle diferentes acabados, y ahí está la magia del maquillaje.

 Es primordial  tener un producto de calidad que nos permita hacer esto.

 Dar un  poco de frescura en la piel un (Makeup no Makeup) o por lo contrario si   buscas un poco más de durabilidad y algo de cobertura poder modular y cambiar la técnica y la herramienta para darle otro acabado.

Sea el momento que sea piensa en que es lo que tú quieres llevar y con el acabado que más cómoda vas a ir. Pero sobre todo, sobre todo, acepta y AMA a tu piel tal y como es, como os decía al principio, una vez hecho ese paso siempre vamos a sacar lo mejor de ella. Todos los rostros tienen algo precioso que destacar, solo tenéis que hacer un ejercicio de autoestima y detectarlo.

Cuando leáis este post quiero que hagáis una cosa, con la cara recién lavada, mírate al espejo y  piensa que es lo que más te gusta de lo que ves, olvídate de lo que no te gusta, que siempre es lo primero que solemos ver. Céntrate en ver lo bonito que tienes PORQUE LO TIENES… y vamos a sacarle partido…

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